Información General | 13/05/2012 | 12:05:00
Neuquén
El
Concejo Deliberante de Neuquén prohibió la comercialización y el uso de
pirotecnia en todo el ámbito de esa ciudad patagónica y advirtió que,
de no respetarse la norma, se aplicarán multas que van de los 2 mil a
los 20 mil pesos.
Tras el paso de varios proyectos sobre el tema durante los diez últimos años, que finalmente quedaron archivados, el cuerpo convirtió en ordenanza la prohibición de pirotecnia en la ciudad de Neuquén por 14 votos a favor de las bancadas de la oposición y 4 en contra del oficialismo.
La resolución, en base a un proyecto presentado por la concejal de UNE Teresa Rioseco, establece multas de entre 2 mil y 20 mil pesos para quienes comercialicen, usen, manipulen, guarden en depósitos o trasladen elementos de pirotecnia en el ámbito de la ciudad.
La sanción de la norma fue respaldada por organizaciones protectoras de animales y del ambiente, así como de grupos de veteranos de la guerra por las islas Malvinas. En 2007, el concejal justicialista Darío Martínez no logró ver aprobado un proyecto similar de su autoría porque no obtuvo los votos necesarios para su tratamiento.
En esta oportunidad, los ediles oficialistas rechazaron la iniciativa con el argumento de que es una norma "de imposible cumplimiento". "El municipio no tiene capacidad operativa para controlar cada una de las cañitas voladoras que caigan un 24 de diciembre a la noche y ver desde donde las lanzaron para ir a multar", consideró el concejal de NCN Leandro López.
Los representantes del oficialismo habían pedido la vuelta a comisión del proyecto para estudiarlo en profundidad, pero se encontraron con la negativa de sus pares opositores. Efectivamente, la resolución establece que el Ejecutivo local es el encargado de controlar el cumplimiento de la medida y de realizar campañas de concientización sobre los peligros que conlleva el uso de pirotecnia.
La ordenanza aclara que de la prohibición quedan exceptuadas las instituciones privadas y públicas que realicen "celebraciones de interés general, con previa autorización del municipio y del Renar y bajo la condición de ser manipulada por personal especializado".
Un proyecto adjunto al de prohibición de la pirotecnia que también fue aprobado por los 14 concejales de la oposición incorpora el artículo 234 bis al Código de Faltas Municipal, que determina sanciones para quienes violen la ordenanza.
"La comercialización, tenencia, uso, manipulación, depósito, circulación y transporte de elementos de pirotecnia será sancionadas con multas de 200 a 2.000 módulos, a la que deberá sumarse el decomiso de la mercadería y en su caso la clausura del local por 30 días. Esta multa no admite pago voluntario", dice el nuevo artículo incorporado.
A partir de la aprobación de esta ordenanza, en las próximas fiestas navideñas no se podrá comercializar, tener, usar y manipular la pirotecnia. En la medida se incluyen cohetes, petardos, rompeportones, bombas de estruendo, cañas voladoras, luces de bengala y fuego de artificio. El único uso permitido estará en mano de instituciones públicas o privadas para celebraciones que involucren a gran parte de la sociedad, como el aniversario de la ciudad.
Tras el paso de varios proyectos sobre el tema durante los diez últimos años, que finalmente quedaron archivados, el cuerpo convirtió en ordenanza la prohibición de pirotecnia en la ciudad de Neuquén por 14 votos a favor de las bancadas de la oposición y 4 en contra del oficialismo.
La resolución, en base a un proyecto presentado por la concejal de UNE Teresa Rioseco, establece multas de entre 2 mil y 20 mil pesos para quienes comercialicen, usen, manipulen, guarden en depósitos o trasladen elementos de pirotecnia en el ámbito de la ciudad.
La sanción de la norma fue respaldada por organizaciones protectoras de animales y del ambiente, así como de grupos de veteranos de la guerra por las islas Malvinas. En 2007, el concejal justicialista Darío Martínez no logró ver aprobado un proyecto similar de su autoría porque no obtuvo los votos necesarios para su tratamiento.
En esta oportunidad, los ediles oficialistas rechazaron la iniciativa con el argumento de que es una norma "de imposible cumplimiento". "El municipio no tiene capacidad operativa para controlar cada una de las cañitas voladoras que caigan un 24 de diciembre a la noche y ver desde donde las lanzaron para ir a multar", consideró el concejal de NCN Leandro López.
Los representantes del oficialismo habían pedido la vuelta a comisión del proyecto para estudiarlo en profundidad, pero se encontraron con la negativa de sus pares opositores. Efectivamente, la resolución establece que el Ejecutivo local es el encargado de controlar el cumplimiento de la medida y de realizar campañas de concientización sobre los peligros que conlleva el uso de pirotecnia.
La ordenanza aclara que de la prohibición quedan exceptuadas las instituciones privadas y públicas que realicen "celebraciones de interés general, con previa autorización del municipio y del Renar y bajo la condición de ser manipulada por personal especializado".
Un proyecto adjunto al de prohibición de la pirotecnia que también fue aprobado por los 14 concejales de la oposición incorpora el artículo 234 bis al Código de Faltas Municipal, que determina sanciones para quienes violen la ordenanza.
"La comercialización, tenencia, uso, manipulación, depósito, circulación y transporte de elementos de pirotecnia será sancionadas con multas de 200 a 2.000 módulos, a la que deberá sumarse el decomiso de la mercadería y en su caso la clausura del local por 30 días. Esta multa no admite pago voluntario", dice el nuevo artículo incorporado.
A partir de la aprobación de esta ordenanza, en las próximas fiestas navideñas no se podrá comercializar, tener, usar y manipular la pirotecnia. En la medida se incluyen cohetes, petardos, rompeportones, bombas de estruendo, cañas voladoras, luces de bengala y fuego de artificio. El único uso permitido estará en mano de instituciones públicas o privadas para celebraciones que involucren a gran parte de la sociedad, como el aniversario de la ciudad.
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